lunes, junio 29, 2009

deja vú


sepan disculpar mi pesimismo
es que hay una parte de mí
que no puede dejar de creer en fantasmas
especialmente porque ciertos recuerdos
se niegan a morir con dignidad
si todavía los diarios de hace treinta años
me resultan inconcebibles
menos esperen que comprenda
los de hoy a la mañana

sepan perdonarme si les ofendo la alegría
esa que tanto les ha costado construir
pero es que una parte de mí
no puede volver a creer
en profetas
mensajes de dioses apocrifos
que han muerto
y se ríen de nosotros
en el infierno del cielo

yo no pretendo con estas palabras
nada en absoluto
ni siquiera que compartan conmigo
la rabia, el miedo, la incertidumbre
tan solo me pregunto
otra vez en voz alta
si esto que pasa es la historia repitiendose
como farsa
u ocurriendo como tragedia
siempre por primera vez

domingo, junio 21, 2009

abyecto

llamenlo victimización, falsa conciencia
pesimismo
pero es a mí y no a ustedes
al que lo han desterrado de la historia
y yo - sera que soy un iluminista incurable-
no puedo soportar un mundo sin sujetos
menos aún si al cabo de que todos los posmodernos
han dicho su verdad y brindan
en el Rojas con Don Perignon
el único sujeto que no está
soy yo

llamenlo si quieren mala suerte
cuestion de tiempo
o de paciencia
pero mientras tanto
es mi cuerpo y mi sexo, no los suyos
los que son obtusamente negados
en mí pequeño universo no existe el tacto
con-tacto, nada erógeno
a duras penas debo aferrarme
de estas palabras
para no caer
y no toco ni soy tocado
ni siquiera digo
son estas debiles palabras
las que me dicen

llamenlo exageración
nihilismo
poesía
como más les guste
pero digan lo que digan
una sola cosa les puedo asegurar
con tanta certeza
como la que tengo de este dolor en el pecho:
la ausencia existe

lunes, junio 08, 2009

mientras tanto

quiero ser la lluvia al otro lado del cristal
no un mero espectador
mirandola caer por la ventana
no la mirada fija en la nada
tampoco la nada
menos todavia la ventana impotente
inmóvil
o la vereda húmeda
la tristeza que se desprende del asfalto
con un perfume dulzón
putrefacto
no cada gota inanimada
que se aplasta
las palabras que insinúa la tarde gris
no la boca que calla
los dedos que no escriben
por temor
todo lo que permanece quieto
yo quiero ser la lluvia
la lluvia nunca se detiene
cada gota es danza
movimiento
no un mero recuerdo
es poesía