jueves, febrero 09, 2012

luis

Gracias por darle nombre a mi blog, por darle vida a mi música y a mi poesía, por servirme de canción para los días de la vida. Gracias eternas, Luis Alberto Spinetta, todavía no puedo creer que te hayas ido.


cómo pudiste, luis
cómo pudiste
irte así
dejarnos tan solos
tan desamparados
nosotros que te creíamos
inmortal
nadie que hable
con tanta verdad, con tanta belleza
(cosa rara
que vayan de la mano esas dos)
puede ser finito
pensamos
creímos
como se creen porque si
tantas otras cosas


no nos diste tiempo
siquiera
para una despedida
aunque no sé
qué se podría haber dicho
ni a quien
creo que lo mejor
hubiese sido sido escuchar artaud
con los ojos cerrados
de punta a punta
quedarse callado
(hay veces que el silencio
es el único discurso que vale la pena).

yo sé sin embargo
que ésta que se marchitó
no era más que tu corteza
en la que el hacha por fin
ha dejado de golpear
pero el río aún no seca
es que vos luis
ya te estás volviendo canción
y todavía somos demasiados
los que pasamos los días de la vida
escuchándote
para aprender a volar
entre tanta gente de pie.